El entrevistado formó parte del grupo fundador de la cooperativa, que provenía del Club Israelita de Avellaneda. Dice que no tenía experiencia cooperativa, pero que "el cooperativismo es innato en la gente progresista". Cuenta que se reunían en un departamento particular hasta que pudieron alquilar un local. La cooperativa se formó para que los industriales pudieran descontar los pagarés que recibían.
El entrevistado se asocia a la cooperativa a los dos meses de creada (socio N° 396) e inmediatamente lo invitan a trabajar el el Consejo de Administración. Fue el encargado de organizar la 1er. cena de promoción, a la que asistieron 80 invitados. Cuenta cómo se compró el terreno y se construyó el edificio. Describe el trabajo de promoción y difusión de la cooperativa. Dice que algunos miembros del Consejo tenían conocimientos de cooperativismo y experiencia de tipo social y política. Otros, en cambio, aprendieron a lo largo del tiempo.
El entrevistado es socio fundador (N° 5) de la Cooperativa, que se llamaba «Nueva Caja...» porque ya existían en la zona la Cooperativa del Oeste (que desapareció en 1966) y Ramos Mejía Soc. Coop. Ltda. creada por el Centro Israelita de Ramos Mejía, que luego se muda y cambia su nombre por Cooperativa Haedo de Crédito, Consumo y Vivienda Ltda.. Los asociados provenían de la clase media baja con actividad comercial. Cuenta detalles sobre la construcción del edificio y sobre las características de la operatoria.
El entrevistado cuenta que su padre, un inmigrante ruso de origen judío, se incorpora a la cooperativa del Sud en 1948. En los primeros tiempos la cooperativa estaba vinculada al Centro Cultural Israelita I. L. Peretz de Lanús y funcionaba en un domicilio particular junto a una mutual (integrada por la misma gente) que daba préstamos casi sin interés. En 1955 construyen un edificio que luego remodelan y la cooperativa comenzó a abrirse a las empresas de la zona desarrollándose.